América frenó el fichaje de Alexis Vega por un motivo que nadie vio venir

Según reveló Jonathan Peña, en Coapa sí existía interés real por Alexis Vega, pero la directiva tomó una decisión tajante: las lesiones constantes y su problema crónico en la rodilla encendieron todas las alarmas y terminaron por frenar cualquier intento de negociación. Y lo más fuerte es que, aunque muchos lo veían como un refuerzo ideal, en América concluyeron que el riesgo superaba al beneficio y ahí comenzó la caída del fichaje.

Alexis Vega tiene talento, explosión, desequilibrio y jerarquía, eso nadie lo discute. Incluso fue una de las piezas fundamentales del Toluca campeón del Clausura 2025, demostrando que cuando está sano puede marcar diferencia como pocos en la Liga MX. Pero justo ahí aparece el problema: su físico ya no responde igual, y en Coapa entendieron que apostar por él podría traer más dolores de cabeza que soluciones y ese análisis detonó la siguiente decisión.

En el Apertura 2025, Vega volvió a mostrar su nivel… hasta que se lesionó en las últimas jornadas de la fase regular. Ese nuevo golpe confirmó lo que América ya venía estudiando: la rodilla no está al 100, y el costo deportivo de tener un refuerzo que podría perderse semanas clave sería demasiado alto para un club que exige competir por todos los títulos. Y mientras más revisaban su historial, más claro quedaba que el riesgo era insostenible.

Lo que terminó de cerrar el caso fue que, según los reportes médicos disponibles, Vega arrastra un problema crónico de rodilla. En Toluca lo han manejado bien, pero en América saben que la exigencia física del club es otra cosa. La pregunta que se hizo la directiva fue simple: ¿Tiene sentido invertir tanto en un jugador que podría no estar disponible cuando más lo necesiten? Y la respuesta llevó a la decisión final.

Toluca lo tiene blindado: valor de mercado de 10 millones de euros y un contrato hasta 2029. Esto significa que, además del riesgo físico, América debía pagar una fortuna para convencer a Toluca o esperar años para que bajara su precio. La directiva sabía que un fichaje así solo se justifica si el jugador está para rendir al máximo. Y cuando sumaron números, diagnósticos y proyección, todo apuntaba a lo mismo: mejor frenar antes de arrepentirse.

Nadie duda de que Vega encajaría perfecto en el sistema de Jardine, que aportaría gol, desequilibrio y una chispa que pocos en México tienen. Pero América no está para apuestas. Necesita certezas, futbolistas disponibles, listos para competir cada semana. Y aunque duela, Vega hoy representa lo contrario: un jugador top… pero rodeado de incertidumbre. Por eso, su fichaje se cayó antes de iniciar formalmente, y en Coapa ya piensan en alternativas más seguras para el Clausura 2026.