América tiene al reemplazo perfecto de Henry Martín y vale solo 1,8 millones
El futbolista que podría llegar a Las Águilas en el próximo año.
Mientras el América mantiene toda su atención en cerrar bien el Apertura 2025 y meterse a semifinales, en las oficinas de Coapa ya comenzaron a proyectar lo que será el 2026. El club entiende que, más allá de los resultados inmediatos, la planificación a mediano plazo es clave para sostener el nivel competitivo que se exige en la institución. Por eso, una de las prioridades para el próximo año apunta directamente al ataque.
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El cuerpo técnico y la directiva coinciden en que el equipo necesita un delantero más. No se trata de un capricho, sino de una lectura real de lo que ha pasado en los últimos meses. Jugadores como “Búfalo” Aguirre o Víctor Dávila tuvieron momentos puntuales, pero no lograron consolidarse como soluciones firmes en los partidos clave. Y, al mismo tiempo, Henry Martín vivió un torneo marcado por lesiones que le impidieron tener continuidad. Aunque sigue siendo un referente, el club sabe que debe prever cualquier escenario.
En ese contexto, hay un nombre que empezó a circular con fuerza: Uroš Đurđević, delantero del Atlas. El atacante ya conoce la Liga MX, tiene experiencia, presencia física y un estilo que podría adaptarse muy bien al modelo de André Jardine si continúa en el banquillo. No es un futbolista de grandes reflectores internacionales, pero sí un delantero que suele rendir, que entiende el ritmo del futbol mexicano y que podría aportar algo que el América ha buscado en este último tiempo: eficacia constante.
Otro punto que seduce a Coapa es su costo accesible. Según su última valoración en Transfermarkt, Đurđević está tasado en 1,8 millones de euros, una cifra que entra sin problemas en el rango de inversión que el club considera razonable para reforzar zonas puntuales. En tiempos donde los precios del mercado internacional suelen ser desproporcionados, encontrar un delantero probado a ese valor representa una oportunidad interesante.
El perfil del serbio encaja con lo que América pretende para 2026: un atacante que pueda competir por el puesto, que tenga margen para ofrecer buenos números y que llegue sin la presión de ser la contratación estelar del año. Además, permitiría equilibrar la plantilla y evitar que el equipo dependa únicamente de la recuperación total de Henry Martín o del salto de calidad que se espera de Aguirre y Dávila.
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