La decisión imperdonable de André Jardine que hundió al América ante Rayados
El entrenador tuvo un error que le costó caro al equipo.
La eliminación del América a manos de Rayados en el Ciudad de los Deportes dejó una sensación difícil de digerir para la afición azulcrema. Todo estaba puesto sobre la mesa para una noche épica: el equipo ganaba 2-0, controlaba el ritmo del partido, Monterrey no encontraba respuestas y, para colmo, los regios se habían quedado con un jugador menos. Era el escenario ideal para sentenciar la remontada y sellar el pase a semifinales del Apertura 2025. Sin embargo, el final terminó siendo uno de los golpes más duros del proceso de André Jardine.
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El gran error del técnico brasileño quedó expuesto de manera dolorosa. En lugar de aprovechar el envión anímico y el hombre de más para buscar el tercer gol que habría liquidado la serie, Jardine decidió retroceder líneas y apostar por aguantar el marcador. El América dejó de presionar, renunció al protagonismo y le entregó la pelota a un Monterrey que, aun con diez, encontró la forma de meterse al partido.
Ese cambio de postura fue letal. Rayados se animó, adelantó a sus hombres y, en los últimos minutos, llegó el golpe que nadie imaginaba: el gol agónico de Germán Berterame que sentenció la eliminación y apagó por completo el sueño de la remontada. Un error de lectura, un bajón en la propuesta y una decisión técnica que cambió todo.
Lo más preocupante para la afición es la pérdida de identidad. Ese América agresivo, dominante y valiente que había caracterizado la mejor versión de Jardine ya no aparece. La esencia que lo hacía gigante se diluyó con el paso de los meses y hoy el equipo no compite con la misma autoridad de antes. La derrota no solo duele por el marcador, sino por la forma en que sucedió: con un América que tuvo todo para avanzar y lo dejó escapar por sus propias decisiones.
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