La firme decisión que tomó Igor Lichnosvky con su futuro tras los rumores de salida
El defensor chileno no entra en los planes de Las Águilas.
Según información que llega desde Chile, Igor Lichnovsky hoy se apoya en un factor determinante para manejar su futuro: su vínculo contractual con el Club América se extiende hasta junio de 2027. Esa condición le da margen para no aceptar una salida apresurada y le permite plantarse ante cualquier escenario que no encaje con lo que considera conveniente para su carrera.
Lichnosvky había sido clave para el bicampeonato
La U de Chile lo tiene en carpeta, pero no es una operación sencilla
Desde Sudamérica, Universidad de Chile volvió a posar los ojos en Lichnovsky como una opción para reforzar su defensa. El interés existe y es real, aunque el posible regreso está lejos de ser automático. Todo dependerá de cómo avancen las negociaciones, tanto con el jugador como con el América, que no está dispuesto a regalar su ficha.
Por ahora, es solo una puerta entreabierta.
En América ya no entra en los planes deportivos
En Coapa, el panorama es distinto. Lichnovsky no forma parte del proyecto deportivo actual, principalmente por el bajo nivel mostrado durante 2025. Errores puntuales, falta de regularidad y un rendimiento lejos de lo esperado lo colocaron en la lista de futbolistas prescindibles.
La intención del club es clara, aunque todavía no sencilla de ejecutar.
Liberar cupo de extranjero, una prioridad silenciosa
Más allá de lo futbolístico, hay un motivo estructural que empuja la posible salida del defensor chileno. América necesita liberar una plaza de extranjero, y su nombre aparece como uno de los apuntados para cumplir ese objetivo de cara al Clausura 2026.
Ese contexto suma presión a una definición que todavía no llega.
Su valor de mercado y el escenario que se abre
Actualmente, Lichnovsky tiene un valor de mercado cercano al millón de euros, según Transfermarkt. Una cifra que facilita el interés de clubes sudamericanos, pero que no resuelve por sí sola el conflicto contractual ni la postura del jugador.
Con contrato largo, interés externo y poco espacio en el equipo, el futuro del chileno sigue abierto, y cada movimiento puede inclinar la balanza en cualquier dirección.