La Selección Mexicana confirmó al reemplazo de Javier Aguirre post Mundial 2026 y mira si será André Jardine
Ivar Sisniega confirmó que Rafa Márquez será el entrenador principal de la Selección Mexicana.
Durante una reciente comparecencia, Ivar Sisniega confirmó que Rafa Márquez será quien tome las riendas de la Selección Mexicana tras el Mundial 2026. “El tema de Rafa Márquez… Uno, tiene contrato en donde él termina su empleo como asistente de Javier Aguirre después de la Copa del Mundo y se integra como el entrenador principal de la selección. Yo ya he tenido reuniones con él y con Duilio (Davino) para explorar su cuerpo técnico y con quien va a trabajar. Es un plan que está en marcha”, declaró Sisniega, dejando claro que el proyecto ya tiene rumbo definido.
Jardine no será opción
A pesar de que André Jardine sonó en varias ocasiones como candidato para dirigir al Tri debido a su gran desempeño en América, finalmente no llegará a México. Jardine tiene contrato vigente con las Águilas hasta 2027 y, por ahora, seguirá enfocado en consolidar su proyecto con el club capitalino. Esto cierra cualquier posibilidad de que el estratega tome el mando del Tri en el corto plazo.
Rafa Márquez al frente del nuevo ciclo
Con Márquez confirmado, la Federación Mexicana apuesta por un proyecto de continuidad y desarrollo a largo plazo. El exdefensor contará con plena libertad para conformar su cuerpo técnico y definir la estrategia futbolística que buscará consolidar a la selección en los próximos torneos internacionales.
Planificación y futuro del Tri
El plan de la FMF incluye no solo la elección del director técnico, sino también la integración de un equipo de trabajo sólido y profesional que respalde la visión de Márquez. Se busca dar estabilidad al Tri, generar un proyecto coherente desde las fuerzas básicas hasta la selección mayor y preparar al equipo para los desafíos que se avecinan después del Mundial 2026.
El proyecto de Márquez y su estilo
Rafa Márquez, con experiencia internacional y un perfil formativo, buscará implementar un estilo de juego definido y sostenido en el tiempo. Su llegada marca un cambio generacional y un enfoque en el desarrollo de jóvenes talentos, con la intención de que México vuelva a ser protagonista en competencias globales.
