Opinión: Emilio Azcárraga ya no puede esperar más, las razones para decirle adiós a Santiago Baños
La gestión de Santiago Baños acumula refuerzos fallidos y decisiones cuestionables.
El Club América atraviesa un momento en el que las excusas ya no alcanzan. Las malas decisiones deportivas, los refuerzos fallidos, la falta de cumplimiento hacia André Jardine y la sensación de que algunas operaciones benefician más a ciertos grupos empresariales que al propio club han puesto a Santiago Baños en el centro de la crítica. La directiva azulcrema no puede seguir ignorando un problema que se ha repetido año tras año: la estructura deportiva no compite al nivel que exige la historia del América. Por eso, es momento de que Emilio Azcárraga reaccione y considere seriamente una reestructuración profunda sin Baños al mando.
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Las malas decisiones que han costado títulos
La gestión de Baños acumula temporadas marcadas por errores en la planeación, decisiones apresuradas y movimientos que no lograron fortalecer al equipo en los momentos clave. La toma de decisiones deportivas ha generado planteles desequilibrados que, aunque competitivos, no han podido imponerse en las fases finales.
Refuerzos fallidos y poca eficacia en el mercado
El América necesita jerarquía, pero Baños ha sumado varios refuerzos que nunca estuvieron a la altura del club. Jugadores que llegaron sin rendir, apuestas que no funcionaron y negociaciones mal ejecutadas han debilitado la estructura deportiva. Mientras otros clubes se reforzaban con precisión, América repetía errores en la planificación.
Jardine pidió jugadores… y no se los dieron
Uno de los puntos más graves fue no cumplirle al entrenador. André Jardine solicitó perfiles específicos para competir en lo más alto, pero muchas de esas incorporaciones nunca llegaron. El resultado fue un plantel incompleto, forzado a improvisar posiciones y con claras limitaciones para enfrentar partidos decisivos.
Operaciones que generan dudas
Diversas fuentes han señalado que Baños mantiene relaciones con ciertos grupos empresariales que terminan influyendo en fichajes, salidas y negociaciones. Esto ha generado ruido dentro y fuera del club, ya que no siempre parecen decisiones pensadas para el beneficio deportivo del América.
Por qué el América debe reestructurarse sin Baños
El equipo necesita un proyecto deportivo moderno, transparente y enfocado únicamente en competir al máximo nivel. Con Baños, el techo ya se vio; y para un club como América, quedarse estancado no es opción. La institución requiere un liderazgo nuevo, con ambición real y visión de futuro.
Es momento de que Azcárraga actúe
El América no puede permitirse seguir perdiendo tiempo. Baños ya cumplió un ciclo y los resultados recientes demuestran que ese ciclo debe terminar. Para recuperar grandeza, claridad y autoridad deportiva, América necesita un cambio profundo… y ese cambio comienza por la salida de Santiago Baños.
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