Santiago Baños, el directivo más criticado y más exitoso de la última década
El presidente del América es muy criticado por la afición azulcrema.
Hablar de Santiago Baños en el entorno del Club América es casi siempre entrar en una discusión. Hay quienes lo consideran un directivo poco arriesgado, otros creen que sus decisiones han limitado al equipo en ciertos momentos, y también están los que reconocen su gestión como una de las más estables de los últimos años. Lo cierto es que, más allá de las opiniones divididas, Baños ha estado al frente de una etapa que ha sido tan cuestionada como ganadora.
Desde que asumió el cargo de presidente deportivo, el América ha conquistado siete títulos oficiales, incluyendo tres de Liga MX, una Copa MX, dos Campeón de Campeones y una Campeones Cup. Son cifras que pocos pueden discutir, sobre todo en una liga donde la competencia y la presión son constantes. Sin embargo, la polémica lo acompaña casi en cada torneo.
Las principales críticas hacia Baños suelen apuntar al mismo lugar: los fichajes. Muchos aficionados sienten que el club podría traer jugadores de mayor renombre, y otros cuestionan la salida de futbolistas que habían rendido bien. También se le señala por la cantidad de lesiones que ha tenido la plantilla en algunos torneos y por no mostrarse autocrítico en ciertos momentos.
Pero más allá de los errores puntuales, hay un aspecto que distingue a su gestión: la continuidad. En una liga donde los proyectos suelen durar apenas unos meses, el América ha mantenido una línea de trabajo con pocos cambios de entrenador. Esa estabilidad ha permitido que el equipo compita de manera constante, llegando casi siempre a las fases finales y manteniéndose en los primeros lugares.
En el plano financiero, Baños también ha sabido mantener un equilibrio. El club ha vendido bien, ha evitado deudas importantes y, aunque no todos los refuerzos funcionaron como se esperaba, logró mantener una base competitiva. Esa parte, menos visible para el aficionado, explica en buena medida por qué América sigue siendo un club sólido y protagonista.
Quizá lo que genera más ruido es que Baños no busca reflectores. No suele aparecer con declaraciones fuertes ni vender promesas. Su estilo discreto contrasta con la exigencia mediática que rodea al América, un club que siempre espera anuncios importantes y figuras internacionales en el equipo.
Con aciertos y errores, Santiago Baños ha sabido sostener un proyecto ganador. Puede no ser el directivo más carismático ni el más popular, pero los resultados están ahí: títulos, estabilidad y continuidad. Y en un club donde la exigencia nunca se detiene, eso ya es decir bastante.
Por: Diego Becerra