Todos los pecados de André Jardine en 2025 que dejaron al América sin títulos

Malos cambios, refuerzos insuficientes y la falta de hambre de jugadores con ciclo cumplido. Repasamos los errores de Jardine.

Malos cambios, refuerzos insuficientes y la falta de hambre de jugadores con ciclo cumplido. Repasamos los errores de Jardine.
Malos cambios, refuerzos insuficientes y la falta de hambre de jugadores con ciclo cumplido. Repasamos los errores de Jardine.
Foto de Diego Becerra
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El 2025 fue un año complicado para América. Tras el tricampeonato, las expectativas eran altas, pero las decisiones de André Jardine en conjunto con la directiva impactaron directamente en que el club no lograra levantar un título. A continuación, repasamos los principales errores que marcaron el año.

Malas decisiones a la hora de armar el equipo

Jardine cometió errores al seleccionar alineaciones para partidos clave. La falta de equilibrio entre experiencia y juventud, así como mantener jugadores fuera de forma, afectó el rendimiento colectivo. La plantilla muchas veces no reflejó el potencial que tenía para pelear campeonatos.

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Cambios poco acertados durante los partidos

Los cambios durante los encuentros importantes no fueron los adecuados. En varias ocasiones, jugadores con bajo rendimiento permanecieron en cancha mientras alternativas frescas quedaron en el banquillo. Esto limitó la capacidad de reacción del América, especialmente en la Liguilla.

Falta de refuerzos de calidad

El mercado de fichajes no se gestionó de manera efectiva. A pesar de que había recursos y necesidades claras, el club no reforzó posiciones estratégicas con jugadores de impacto, lo que debilitó al equipo en la competencia y dejó carencias visibles en momentos decisivos.

Confiar en futbolistas que ya cumplieron un ciclo

Al mismo tiempo, se apostó por jugadores que habían cumplido un ciclo, como Igor Lichnovsky, Víctor Dávila, Búfalo Aguirre y Kevin Álvarez, en lugar de buscar alternativas más frescas o competitivas. Esta estrategia restó dinamismo y capacidad de respuesta en los partidos más exigentes.

Falta de hambre y mentalidad ganadora

Tras el tricampeonato, quedó claro que el equipo no tenía la misma hambre. Jardine no logró mantener la intensidad ni la mentalidad ganadora que caracterizó al América en los años anteriores. Esto se reflejó en partidos donde el club no salió a jugar con fuerza frente a rivales importantes.

Consecuencia: un año sin títulos

Todos estos factores combinados llevaron a que el América terminara el 2025 sin campeonatos. La planificación, los cambios tácticos, la falta de refuerzos de impacto y la baja intensidad marcaron un contraste con los años anteriores, recordando que el éxito pasado no garantiza resultados futuros.

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