André Jardine le da un duro golpe a Rodrigo Aguirre a pocos meses del Mundial 2026
El atacante uruguayo quiere disputar el torneo internacional con su país.
Rodrigo Aguirre tiene un panorama complicado si quiere llegar al Mundial 2026. Según cuenta el periodista Jonathan Peña, el Club América ya avisó que no dará permisos a sus jugadores extranjeros para irse con sus selecciones antes de que termine la liguilla, algo que no pasará con los mexicanos. Esto significa que Aguirre tendrá que jugar hasta el último partido con las Águilas antes de volar con Uruguay, lo que aprieta mucho sus tiempos de cara a la Copa del Mundo. Lo curioso es que, hace apenas unas semanas, la directiva ni siquiera contaba con él para este torneo.
El intento de venta que el jugador detuvo
Al principio, el América tenía la idea de vender a Aguirre para liberar una plaza de extranjero y traer a alguien más. Sin embargo, el delantero se puso firme y dijo que no quería salir, porque sabe que estar en un equipo grande es lo que lo mantiene en el radar de su selección. Como tiene contrato hasta 2027 y no aceptó ofertas, el club tuvo que cambiar sus planes y buscar a otros candidatos para abandonar el nido. Esa decisión de quedarse obligó a la directiva a poner el ojo en otros tres jugadores que ahora están en la cuerda floja.
Los extranjeros que sí saldrían del equipo
Como Aguirre se queda, el América necesita sacar a otros jugadores para poder registrar refuerzos. Los nombres que están en la rampa de salida son Igor Lichnovsky, Javairo Dilrosun y Víctor Dávila, quienes podrían dejar el club en este mercado para liberar esos cupos de extranjero. La idea de Santiago Baños es acomodarlos en otros equipos lo antes posible para traer gente nueva que le dé otra cara al plantel. Pero para Aguirre, quedarse no solo significa competir aquí, sino jugarse su última carta para convencer a Uruguay.
La liguilla será su examen final para el Mundial
Para el delantero uruguayo, jugar la fase final completa con el América será la prueba de fuego definitiva. Necesita sumar todos los minutos posibles y demostrar que está en buen nivel para que lo tomen en cuenta en la lista final de su país para el 2026. Al final, se está jugando el todo por el todo: quedarse en México le asegura visibilidad, pero le exige estar al cien por ciento en los partidos más intensos justo antes de la cita mundialista.
