El América no puede seguir regalando temporadas: la exigencia es hoy, no mañana
América está obligado a conseguir cosas importantes en cada temporada.
OPINIÓN
En el América ya no hay margen para discursos, excusas ni promesas a futuro. El club más grande de México vive bajo una regla muy simple: cada torneo que no termina en título es un fracaso, por más semifinales, récords o partidos brillantes que haya en el camino. Y después de los altibajos de los últimos meses, el Apertura 2025 ya no es una meta: es una obligación absoluta.
El americanismo lo sabe y la directiva también. El plantel está armado para ganar, con figuras de peso, extranjeros de jerarquía y una inversión que ningún otro equipo del país puede igualar. Con esa estructura, cualquier resultado que no sea levantar el trofeo queda automáticamente por debajo de la expectativa mínima del club.
La idea de “seguir construyendo” dejó de tener sentido. América no es un proyecto en desarrollo; es una institución que debe competir para campeonar siempre. Lo que en otro club sería un proceso normal, en Coapa se interpreta como estancamiento. Y después de ver cómo se escaparon títulos en torneos recientes, la paciencia del entorno se agotó.
El equipo tiene plantel, presupuesto, jerarquía y argumentos futbolísticos para dominar la Liga MX. Además, jugadores clave ya están recuperados, la plantilla luce más completa que en torneos anteriores y el cuerpo técnico tiene estabilidad. Con todo eso, no hay justificación posible: ganar el Apertura 2025 es el mínimo indispensable.
América no puede seguir regalando temporadas. No puede conformarse con competir. No puede aplaudir semifinales. No puede vivir del “casi”.
La exigencia es hoy. No mañana. Y el título del Apertura 2025 no es un objetivo: es su obligación natural.
Lo mismo pasará con el Clausura 2025, la Concachampions y la Leagues Cup del próximo año. Las Águilas están obligados a ganar y no deben seguir regalando nada por su grandeza.
Por: Diego Becerra.